Conrado Tognetti, el estufero que había sido mi maestro seis años atrás con las estufas Rocket, daría un taller de construcción de estufas Gymse en la casa de Jorge Belanko. Por ese entonces yo me encontraba en una situación particular, con una hija recién nacida y poco trabajo. Aún así sabía que debía hacer lo posible por asistir.

El predio donde vive Jorge Belanko es el sueño de todo permacultor. Hay experimentos y construcciones naturales en cada rincón, y Jorge es feliz explicando todo.

Eramos 15 inscriptos, e íbamos a construir una estufa Gymse en el lugar que, durante años, ocupara una estufa de las que en Argentina llamamos Rusa, un modelo de estufa de masa simplificado, basado en las estufas rusas originales, pero adaptado por el INTA para la autoconstrucción. Jorge había usado su Rusa durante años, y le había hecho algunas modificaciones para agregar masa y mejorar el desempeño.

Entre los asistentes del taller habíamos estuferos, constructores naturales, autoconstructores y entusiastas de la bioconstrucción en general. Conrado nos organizó en cuatro grupos y fuimos rotando en la construcción de la estufa, mientras las charlas sobre bioconstrucción y temas diversos se sucedían.








